TIENE EN SU CESTA DE LA COMPRA
en total 0,00 €
Cuando llega la hora de sentarse a la mesa, ¡los alimentos no se están quietos! Y Paula, así, no puede comer. Sus padres se enfadan, pues con la comida no se juega.
Pero no es Paula la que ha provocado la situación, son los alimentos que se han sublevado.